Tengo tantas ganas de escribir... de contar cosas, voy guardando palabras, hechos y frases que me vienen conforme voy viviendo y confió en mi memoria de que las guardara intactas ¡que tonto!.
Hoy desconfió hasta de ella, he llegado a ese punto, incluso yo mismo me contradigo, a veces creo que yo me engaño, creí que eran los demás los que debían confiar en ti... He dejado la amistad a un lado, hoy pienso que solo existen las personas que llegan a tu vida porque necesitan de ti, las que llegan para enseñarte algo, las que vienen para tentarte, las que te regalan la sonrisa para que no pierdas la esperanza y las que te entretienen para que no llegues a donde querías llegar.
Llego y veo este trozo de papel virtual y me bloqueo, he olvidado aquella bonita frase, ese interesante símil y esa rima de ese día en el que estuve...
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